Las costumbres hacen las leyes y es por esa razón que los dominicanos nos hemos acostumbrados, y ya es como una ley, recibir como receta médica los antojos de la Junta Central Electoral. Es tiempo de que nos sacudamos de ese retroceso, no estamos en los tiempos de Concho Primo amarrando perros con longaniza.
Nací bajo el hedor de una dictadura de la cual yo desconocía su macabro alcance. Fui testigo inocente, transportista de una cultura que se adueñó de la mayoría de los dominicanos: “sinservilismo agudo”. Soy poeta en bruto de un quehacer continuo en el que me importa los demás. Hoy me siento prisionero de un destino que yo no soporto y donde los pobres aplauden a sus verdugos. Justifican todo lo que nos hacen, aunque sea a puro latigazo y subida de impuestos. Soy la misericordia de mis antepasados y el paño de lágrima de las próximas generaciones a las cuales dejo mi legado de inconformidad con mis escritos. Hoy las razones sobran para hacer una revolución con paredón y todo, pero resulta ser que las bocinas modernas con “toga birrete”suelen aplaudir y mortificarme. Los verdugos y sus aliados moldean la mente de los hambrientos débiles.
Debo seguir con la letanía en cada artículo; la JCE y Rosario son anexos de Miguel Vargas y Danilo, perros amaestrados de Joao Santana. Desde Brasil este señor sigue dando órdenes sobre el procedimiento a seguir en la Junta Central Electoral Dominico-brasileña. Ya tenemos los informes de cómo se comunican de forma constante, Danilo Medina y Joao Santana;es truco de cámara muy fácil de descubrir. Ya la tecnología está al alcance de los infantes y mayores, lo que nos falta es voluntad y determinación para arrancar de raíz este cáncer que se llama Junta Central Electoral Dominican-brasilena.Por más de 50 años he sido testigo de los procedimientos maliciosos de la Junta Central Electoral. Podríamos si nos unimos a una sola voz: “suspender el proceso hasta que se garantice un conteo seguro”.
Lo peor del caso es que esto lo dice un exiliado voluntario, mismo quien una vez le reprochó a Bosch el hecho del: “borrón y cuentas nuevas”. Bosch hizo demasiado concesiones al pasado que creíamos podrido, les entregó el podery perdimos.
Me siento atrapado entre el presente y el pasado con la responsabilidad de moldear un futuro, pero necesito ayuda de la gente que piensa como yo. Hay muchos que se alejan de la realidad de hoy. Me irrita pensar que gente no entiende que se nos hace tarde para iniciar el proceso de realizar nuestro destino, involucrarnos en el cambio para siempre. Yo quisiera ser parte activa del cambio que necesita la patria, por favor no me dejen fuera. Ya pasamos un invierno de perros, el 15 de mayo podría ser primavera de la esperanza. Hay que desprenderse de las viejas tradiciones leyes de latrocinio y engañifas.
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